El verano ha llegado y, con él, el calor que tanto gusta a unos y que aterra a otros. Pero a todos os va a gustar lo que hoy os proponemos: unas ideas fáciles y ricas con las que os vais a refrescar. ¿Os apetece variar un poco y salir del típico cono de chocolate y vainilla? Aquí os dejamos 5 helados de frutas que no os arrepentiréis de probar.  

¡Manos a la obra!

Helado de aguacate, piña y coco

Mezclamos todo en una batidora, picadora, etc. Añadimos el coco rallado en último lugar, cuando la mezcla esté hecha. Pasamos a un molde y congelamos durante 6 u 8 horas

  • ½ aguacate
  • 100gr de piña 
  • 2 cucharadas de yogur de coco 
  • ½ cucharadita de pasta de dátil (o el endulzante que prefiráis) 
  • 2 cucharadas de coco rallado 

Helado de fresa y plátano

Batimos todo hasta tener una mezcla bien integrada. Una vez esta esté lista, podemos añadir trozos de fresa o plátano. Vertemos en el molde y lo llevamos al congelador durante 2 horas mínimo.  

  • 3 tazas de fresas congeladas 
  • 3 plátanos congelados 
  • Yogur griego 

Helado de limón

Rallamos el limón y lo exprimimos. Mezclamos la ralladura y el zumo con la leche condensada. Montamos la nata aparte. Una vez montada, integramos las dos mezclas. Congelamos durante al menos 4 horas.  

  • 1 limón 
  • 200gr de leche condensada 
  • 200ml de nata para montar

Helado de melón

Cortamos el melón (puede ser de cualquier tipo) y lo trituramos junto con el azúcar. Montamos la nata aparte. Juntamos las dos mezclas y lo congelamos durante 45 minutos. Pasado este tiempo, sacamos la crema y la batimos de nuevo. Volvemos a congelar durante media hora y volvemos a batir. Habrá que repetir este paso dos veces más. Finalmente, congelamos durante 4 horas.  

  • ½ de melón
  • 60gr de azúcar 
  • 250ml de nata para montar 

Helado de mango

Trituramos los mangos hasta obtener una crema. La cocemos a fuego medio hasta que reduzca. Removemos para que se enfríe y le añadimos la leche condensada. Montamos la nata aparte. Integramos las dos mezclas poco a poco y, una vez conseguida una masa homogénea, la congelamos durante 12 horas

  • 2 mangos maduros 
  • 1 lata de leche condensada 
  • Nata para montar (dos tazas) 

Como habéis visto, más fácil imposible. No tenéis excusa para no probar estas delicias. 

Todos estos helados se pueden presentar de la manera que prefiráis. Podéis usar un molde grande y servir en forma de bola. Pero también tenéis la opción de utilizar moldes propios junto con el palito (o vasos de plástico con una cuchara). 

Sea como sea, esperamos que este verano saboreéis al máximo la fruta, que tan importante es en nuestra alimentación y que ofrece posibilidades de consumo tan ricas y espectaculares como lo es un buen helado. ¡Que aproveche!