Blancos o morenos, tamaño S o XL, la categoría… elegir qué huevos consumir puede ser una tarea difícil de lograr. A continuación, os vamos a contar todo lo que necesitáis saber para comprar los que mejor se adapten a vuestras necesidades:
- El tamaño. Los huevos se clasifican de pequeños a supergrandes con las siglas:
– S (small). Pequeños de menos de 53 gramos.
– M (medium). Medianos entre 53 y 63 gramos
– L (large). Grandes entre 63 y 73 gramos
– XL (extra large). Súpergrandes con más de 73 gramos
- El color. A pesar de que antiguamente se consideraban mejores los morenos, actualmente se ha demostrado que un huevo blanco y un huevo moreno tienen la misma composición nutricional y por tanto la misma calidad. Su color sólo depende del color de la gallina que los ponga.
- La fecha de consumo preferente, los huevos tienen una fecha de caducidad de 28 días después de su puesta.
- El código, todos los huevos llevan impresos un número en su cáscara que significan lo siguiente:
El primer dígito va del 0 al 3 e indica la forma de cría de las gallinas:
– 0= Producción ecológica. Son gallinas que no han sido tratadas con productos químicos y se comen alimentos sin pesticidas ni fertilizantes químicos ni transgénicos.
– 1= Gallinas camperas. Son las gallinas que viven en naves, pero tienen acceso al campo. Comen pienso tradicional.
– 2= Gallinas criadas en suelo. Son iguales que las anteriores, solo que viven en naves sin salida al exterior, se crían en el suelo y comen pienso tradicional.
– 3= Gallinas criadas en jaulas. Viven en jaulas y comen pienso tradicional.
El segundo y tercer dígito son las letras indicativas del país europeo de origen de los huevos. En el caso de España sería ES.
Los dos dígitos siguientes indican la provincia
Los tres siguientes designan el municipio donde está ubicada la granja y los tres dígitos finales son los números de la granja o explotación ganadera.
- La categoría
– Clase A. Huevos frescos de la máxima calidad destinados al consumo humano directo. No son lavados ni pueden estar refrigerados.
– Clase B. De segunda calidad, cuyas características no permiten su clasificación en la categoría de huevos frescos. Estos huevos han sido refrigerados y tratados. Son aptos para uso industrial.
– Clase C. Son aptos para el consumo humano, pero únicamente podrán destinarse a industrias alimentarias autorizadas o a industrias no alimentarias
Una vez elegidos, recuerda que la mejor manera de conservar los huevos es en la nevera y con la punta más fina hacia abajo.¡ Qué disfrutes de un buen huevo!